Se sabe con seguridad que la contaminación atmosférica perjudica seriamente a las vías respiratorias pero recientes estudios han llegado a la conclusión de que no solo son las vías respiratorias las perjudicadas sino tambien el cerebro.Gases como el monóxido de carbono, el dióxido de nitrógeno, el dióxido de azufre y el ozono afectan considerablemente a este órgano tan importante del cuerpo humano. Ver más